·         El urbanista y arquitecto resaltó la necesidad de optimizar y reorganizar la planeación urbana para construir ciudades más transitables: "un país desarrollado no es aquél donde los pobres tienen autos, es donde los ricos viajan en transporte público".

Durante el segundo foro de la Convención Nacional "Repensando el Futuro en Verde", organizada por el Partido Verde, el urbanista Jeff Speck destacó la necesidad de trabajar en la planeación de ciudades "más transitables", por una mejor calidad de vida para las personas.  

El arquitecto abrió la charla agradeciendo la invitación del Verde y el interés por escuchar su mensaje, previo a asegurar que por primera vez se encontraba en un acto de este tipo, organizado por un instituto político.

Para iniciar su participación, Speck destacó el impacto económico que representa una mala planeación en materia de movilidad, lo que complica el traslado de las personas, pues países como Estados Unidos gastan en promedio el 20% de sus ingresos en transporte y el impacto es mayor para los sectores con menos recursos, que llegan a destinar hasta el 40 % de sus ingresos. Asimismo, ahondó en la relación entre la expansión urbana y la salud pública, pues el hecho de privilegiar el uso del automóvil particular o de tener que recorrer largos trayectos para llegar a un destino, contribuye a tener sociedades menos saludables, lo que impacta en la tasa de mortalidad.

Aseguró que apostar a uso de los autos eléctricos no es una alternativa verde en su totalidad, pues éstos también generan un impacto ambiental y contribuyen a estilos de vida derrochadores: "es lo que llamamos dispersión urbana y es un modelo tremendamente insostenible", puntualizó.

Jeff Speck resaltó la necesidad de optimizar y reorganizar la planeación urbana para construir ciudades más transitables  e impulsar medios de movilidad alternativos para reducir el congestionamiento vial, considerando como regla orientar la densidad de viviendas al tránsito y el tránsito a la densidad de viviendas.

Posteriormente, reconoció los esfuerzos de algunas ciudades, entre ellas la Ciudad de México, para impulsar la creación de desarrollos con menor existencia de estacionamientos, toda vez que mientras más espacios de ese tipo haya, más se promueve el uso del auto particular: "un país desarrollado no es aquél donde los pobres tienen autos, es donde los ricos viajan en transporte público", argumentó.

Añadió que existe el pensamiento de que se puede eliminar la congestión ampliando las calles, lo que es totalmente un mito, pues existen estudios que comprueban que cuando se agrega capacidad a una calle o a una autopista, esos nuevos espacio (carriles) son ocupados inmediatamente, lo que además contribuye a vialidades más rápidas en las que existe una mayor incidencia de accidentes.

En ese sentido, el urbanista reconoció el esfuerzo realizado en lugares como la Ciudad de México de proveer a la ciudadanía infraestructura como las ciclovías, aunque recordó que es necesario trabajar por mantenerlas despejadas y libres de basura para que se usen únicamente en el tránsito de bicicletas.

Finalmente, aseguró que para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos es fundamental promover políticas públicas para el acceso a medios de transporte público, subsidiar la compra de bicicletas, financiar la reparación de las calles para hacerlas más seguras, modificar la normatividad para reducir la velocidad con la que transitan los automóviles y trabajar en eliminar la expansión de rutas que promuevan el uso del auto particular, como los largos trayectos para las escuelas y/o los centros de trabajo.

Por su parte, los representantes, legisladores, asesores y miembros del Verde Ecologista coincidieron en que hace falta encaminar esfuerzos para mejor la planeación urbana de las ciudades mexicanas, con enfoque de sostenibilidad.